La comida popular, que comenzó a las 13 horas con lluvia, consistió un couscous marroquí, gazpacho andaluz, humus y fajitas veganas; además de te saharaui y bizcocho vegano. El acto contó con una participación de vecinas y vecinos muy modesta que se fue incrementando a medida que los actos culturales se sucedían: tras la actuación de Marcos Peñalosa, que comenzó caldeando el ambiente durante gran parte de la comida, se sucedió una demostración de baile boliviano por parte del colectivo Juventud Boliviana. Por último, hubo un taller de pinturas con niñas y niños del barrio, ya cerca de las 18 horas, momento en el que el acto tenía previsto terminar.
Durante el acto, se decoró la calle donde se celebraba con globos y pancartas antirracistas, y se mantuvo música de ambiente entre las actuaciones. Sin embargo, la amenaza de lluvia impidió que finalmente otros grupos musicales que tenían previsto actuar se acercaran.
Así, la Coordinadora Antifascista de Sevilla considera esta comida popular como un primer paso en la lucha antifascista y antirracista, como forma de ir saliendo a la calle, reivindicando el uso de la misma en convivencia y paz. Asímismo, sirvió para la propia Coordinadora en su relación con los movimientos sociales y políticos de la ciudad, para ir marcando una pauta de acción conjunta y aunando fuerzas y experiencias de lucha en el marco de una realidad social desmovilizada.
Vídeo de la actuación boliviana:
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