A las 1 de la tarde, era impresionante el despliegue policial en una de las zonas más turísticas de Sevilla. ¿El motivo? Muchas de las familias desalojadas y otras personas solidarias nos habíamos concentrado frente al palacete del Conde Solís, dueño de la corrala recuperada y hoy desalojada.
La imagen de esa gran cantidad de efectivos policiales, cargando sus equipos antidisturbios, era cuanto menos grotesca. Grotesca y representativa de la vara con que se mide la justicia en Andalucía. A cuidar al gran hombre, su palacete, su propiedad privada, al propietario que deja en la calle a esas familias. A reprimir y defenderse de unas pocas personas con niños y niñas, personas muy humildes y al día de hoy sin un techo.
Cabe aclarar que previo al desalojo de hoy, fueron infructuosos los intentos de esas familias y otras organizaciones para entrar en contacto con ese propietario y que este aceptara recibir el dinero proveniente de alquileres sociales. La respuesta fue el uso de la fuerza hoy en la madrugada.
Cuando aún era noche, en un operativo más propio de una serie estadounidense, las fuerzas policiales invadieron la vivienda arrastrando todo a su paso.
Antes de que tocaran las 5.00 horas de este lluvioso martes, el operativo ha tomado por sorpresa a las cinco familias carenciadas que estaban en ese momento en la casa (entre las que se encuentran cuatro niñxs y algunas personas con problemas de salud) ubicada entre las calles Conde Torrejón y Quintana y que estaba ocupada desde el pasado mes de junio, no teniendo una orden de desalojo en ese momento.
Han roto los muebles, no han podido sacar sus pertenencias, los han expulsado sin más, solo han podido llevarse lo mínimo -entre lo que evidentemente no se encontraban los implementos básicos para llevar adelante su vida cotidiana, cocinar, dormirse, sentarse...nada han dejado en pie. Lo han destruído casi todo.
Hoy en la esquina de la calle Cuna, palacete del dueño de las casas desalojadas, junto a las familias desahuciadas compartíamos su amargura y su rabia. "Nos han tratado como delincuentes" decía una de las señoras, rodeada de sus hijos. "Tomaron por asalto las casas, entrando por a azotea, era de noche. Nos hemos asustado mucho..."
Consultadas -por una agencia internacional- fuentes del 15-M informaron que el dueño de estas viviendas es el Duque de Solís, "uno de los propietarios de más viviendas en la Alameda", con el cual han estado intentando estos meses "negociar para llegar a un acuerdo" que permitiera a estas familias pagar un alquiler de acuerdo a sus posibilidades --similar al alcanzado hace un mes por una de las 'corralas' en Triana--, pero las conversaciones "no han sido fructíferas".
En estos momentos, las familias se encuentran de forma provisional en las viviendas ocupadas de la 'Corrala Utopía', pues desde el 15-M aseguran que estas personas no cuentan con más opciones ni familiares que puedan hospedarles.
Es importante destacara que el propietario de las viviendas se ha hecho presente en la corrala desalohjada con uan cuadrilla de albañiles para comenzar a derribar las viviendas y de esta forma impedir que vuelvan a ser ocupadas.
Una agencia de noticias, informa que la 'Corrala Condequintana' era la segunda más longeva tras la 'Utopía' y también la segunda que ha sido desalojada, como sucedió en septiembre con una de la calle Feria. Desde el 15-M aseguran no obstante que estos desalojos no evitarán que surjan más 'corralas', pues sigue habiendo "muchas familias con necesidad de vivienda".´
por: kaosenlared.net
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